Puig se alía con Jacquemus y lanzará su nueva línea de belleza

La multinacional española Puig, compañía especializada en el mundo de la moda, la perfumería y la cosmética como dueña de un amplio abanico de licencias de distintas firmas internacionales, así como matriz de las casas Paco Rabanne, Carolina Herrera, Jean Paul Gaultier, Nina Ricci, Dries Van Noten, Penhaligon’s y L’Artisan Parfumeur, sigue engordando su línea de negocio, en esta ocasión tras lograr hacerse con los derechos para el desarrollo de la nueva línea de belleza de Jacquemus. Firma francesa fundada por el creativo Simon Porte Jacquemus, convertida en una de las marcas de estilo de vida con más pujanza de estos últimos años, gracias al atractivo de sus colecciones venidas del mundo natural.

Con sus marcados aires mediterráneos bañados por la luz, el color y las templadas temperaturas venidas de esa región de la Provenza en la que naciera el propio diseñador, Porte Jacquemus fundaba Jacquemus, su propia firma de moda, en el año 2009. Desde entonces tanto la casa francesa como su director creativo no han cesado de recibir menciones y reconocimientos por parte tanto del público como de la crítica, empezando por aquella temprana invitación a participar de la Semana de la Moda de París de 2012. Momento en el que el diseñador mostraba su primera colección sobre la pasarela francesa, firmando su debut oficial en un mundo de la moda, a cuya incursión le seguirían nuevos y estimulantes capítulos, como los de confeccionar una colección cápsula para La Redoute en 2014, o el ser galardonado con el Premio Especial del Jurado del premio LVMH Prize durante su edición de 2015. Unos primeros logros que permitían al diseñador continuar expandiendo su universo creativo hacia nuevos ámbitos de la moda, sumando a su inicial línea femenina su primera línea de calzado en 2017, y sus primeras colecciones para hombre, disponibles ya desde el pasado año de 2019.

Categorías todas ellas cuyo desarrollo ha conllevado el modelado de una amplia variedad de tipos de prendas y de complementos, desde sombreros a bolsos convertidos ya en iconos entre los amantes de la moda, y a las que ahora el francés se encontraría plenamente dispuesto a sumar una nueva línea de belleza. Uno de los escasos sectores de los que Jacquemus, que incluso se ha encargado de llevar su imaginario al universo gastronómico diseñando el café “Citron” y el restaurante “Oursin” de las Galerías Lafayette de los Campos Elíseos, permanecía alejado, hasta ahora. Una nueva aventura para la que habría escogido como compañera de viaje a Puig. Compañía especializada precisamente en el desarrollo de este tipo de líneas, desde donde se encontrarían ya trabajando, según las informaciones adelantadas por el medio estadounidense de noticias Wwd, en el desarrollo de esta nueva línea de belleza que estaría programado que pudiera ver la luz a lo largo del próximo año de 2022. Punto que no han querido entrar a desmentir ni a confirmar, por el momento, ninguna de las partes, y sin que por el momento haya trascendido de qué manera verá a luz esta nueva línea de belleza de la casa Jacquemus, o si su andadura llegará de la mano del primer perfume del diseñador o de una distinta variación de artículos cosméticos.

Puig, empresa familiar y una de las mayores especializadas en perfumería y moda

En cuanto a lo que atañe a Puig, el Grupo familiar español encuentra sus orígenes en el año 1914. Momento fundacional de una compañía que ha sabido permanentemente continuar expandiendo su sólido modelo de negocio, apostando por una creatividad y una innovación que la han llevado a convertirse en una de las cinco mayores fabricantes del mundo de perfumes, así como un importante agente a considerar dentro del mundo de la moda. Papel este que desempeña desde su posición de dueña de las firmas de moda Paco Rabanne, Carolina Herrera, Jean Paul Gaultier, Nina Ricci, Dries Van Noten.

Entre los últimos movimientos a destacar protagonizados por la compañía, actualmente liderada por Marc Puig, miembro de la tercera generación de la familia Puig, se encuentran la compra el pasado 2020 de una participación mayoritaria de la firma cosmética Charlotte Tilbury, operación con la que firmaba su desembarco en el sector de la cosmética, o la entrada, hace escasamente unas semanas, en el capital de la compañía china especializada en perfumería Scent Library. Todo ello respaldado por un sólido modelo comercial, con el que la compañía española llegaba a generar, durante el complicado ejercicio del pasado 2020, unas ventas totales por valor de 1.537 millones de euros, recogiendo como resultado unas pérdidas netas por valor de -70 millones de euros. Un comportamiento excepcional a causa de la pandemia, que su dirección espera poder revertir, con vistas a poner rumbo hacia los 3.000 millones de euros en ventas para 2023, y con el objetivo de alcanzar los 4.500 millones para 2025.