Incautadas en Sevilla más de 4.500 falsificaciones por valor de 1,5 millones de euros

La Policía Local de Sevilla ha intervenido más de 4500 artículos falsificados en un almacén de unos 1500 metros cuadrados en el Polígono Industrial Aeropuerto de la ciudad. Entre los artículos incautados, más de 1800 eran bolsos y otros complementos de marcas conocidas.

El valor de mercado de la mercancía incautada, que ha sido trasladada y depositada en almacenes municipales en un total de 79 cajas precintadas, se estima en más de 1.5 millones de euros.

El responsable del almacén, un hombre de 33 años que ya ha tenido enfrentamientos previos con la Policía Local de Sevilla por motivos similares, ha sido identificado y notificado sobre los cargos en su contra.

Aunque se le acusa de un delito contra la propiedad intelectual, que afecta a los derechos legítimos de las marcas originales y perjudica tanto a los fabricantes legítimos como a los consumidores, el sospechoso no ha sido detenido en esta etapa de la investigación.

Entre las marcas falsificadas identificadas en esta operación se encuentran nombres reconocidos en el mundo de la moda, como Bimba y Lola, Zadig & Voltaire, Louis Vuitton, Balenciaga, Christian Dior e Icon Dsquared2, entre otras.

España es el segundo país de la UE que más productos falsificados compra

Según el último estudio de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) España es el segundo país de la Unión Europea (UE) que más productos falsificados compra de forma intencionada, tan solo por detrás de Bulgaria.

La investigación revela que un 20 por ciento de los españoles, especialmente entre los 15 y 24 años, han comprado productos falsificados de forma intencionada en los últimos doce meses. Una cifra récord en el país desde que el organismo comenzó a realizar este análisis en 2016.

La ropa (17 por ciento) y el calzado (14 por ciento) son los productos falsificados más consumidos tanto en España como en la mayoría de países europeos.

Aunque el precio suele ser el principal motivo, desde la UE se hace hincapié en que la problemática de las falsificaciones no se limita al daño a la propiedad intelectual de una marca, sino que también tiene un impacto significativo en la sociedad, el medio ambiente e incluso en la salud, especialmente en productos como perfumería y cosméticos, que no pasan por los controles sanitarios adecuados.