Competencia recurre la “Tasa Amazon” adoptada por el Ayuntamiento de Barcelona

El Ayuntamiento de Barcelona aprobó el pasado febrero la conocida como "tasa Amazon" o "TREC", un impuesto que grava la actividad de las empresas de comercio electrónico debido al uso especial que hacen del espacio público para sus entregas.

El objetivo municipal detrás de este impuesto era promover un consumo más sostenible y de cercanía. Se calculó este cargo añadido hasta el entonces desarrollo de su actividad basándose en el supuesto coste de ocupación de la vía pública, que situaban en torno a los 2,6 millones de euros.

La Comisión Nacional del Mercado y Competencia (CNMC) ha decidido presentar ahora un recurso contencioso-administrativo contra la ordenanza municipal que habilitó esta tasa.

Consideran que es "desproporcionada" y distorsiona el mercado al afectar únicamente a las entregas de objetos adquiridos por internet, "modificando las reglas del juego en el mercado minorista y postal".

La tasa afecta la competencia en el mercado minorista

La CNMC ha señalado que varias medidas de esta Ordenanza son desproporcionadas y están creando obstáculos a la competencia, así como distorsiones en los mercados de la distribución comercial minorista y en el mercado de la distribución postal.

Esta ordenanza establece una tasa aplicada solo a las entregas de bienes en el domicilio de los consumidores cuando la compra se ha realizado a través de Internet. Sin embargo, la tasa no se aplica a las entregas a domicilio de bienes adquiridos en tiendas físicas o mediante venta telefónica, ni a las entregas realizadas por operadores postales, incluso si la compra se ha realizado a través del comercio electrónico.

Esta disparidad en la aplicación de la tasa ha generado un trato desigual entre diferentes formas de comprar y entregar bienes, lo que ha llevado a distorsiones en la competencia dentro del mercado, pues las entregas realizadas por operadores postales de menor tamaño, aquellos con una facturación anual inferior a un millón de euros en la ciudad de Barcelona, están exentas de la tasa.

No está demostrado que los operadores con menor facturación utilicen menos el dominio público

Una exención que ahora cuestionan desde la CNMC, ya que los estudios presentados por el Ayuntamiento de Barcelona no demuestran que los operadores con menor facturación utilicen menos el dominio público que los operadores con una facturación superior.

“En un momento en el que la digitalización de los servicios y las compras en línea han experimentado un auge significativo, es fundamental que las regulaciones sean justas y equitativas para todos los participantes del mercado”, defienden desde la Comisión Nacional del Mercado y Competencia en un comunicado, asegurando que solo están comprometidos con “promover una competencia sana y efectiva, que fomente la innovación, beneficie a los consumidores y contribuya al crecimiento económico del país”.

Ante esta situación, la CNMC, amparada en el artículo 5.4 de la Ley 3/2013, de 4 de junio, este organismo ha ejercido su derecho a impugnar los actos administrativos y disposiciones con rango inferior a la ley que obstaculicen la competencia efectiva en los mercados.

Ahora corresponderá al Ayuntamiento de Barcelona revisar las medidas impugnadas y buscar un equilibrio entre los intereses de los comerciantes minoristas, los operadores postales y los consumidores, para evitar distorsiones y garantizar un mercado competitivo y justo para todos.