3D - Facilitando la transformación digital en la industria de la moda
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A pesar de la perspectiva de ganancias significativas en eficiencia y sostenibilidad, la aplicación de la tecnología 3D en la industria de la confección sigue siendo relativamente lenta en comparación con el mundo de la moda, que por otra parte avanza a un ritmo acelerado. La falta de mano de obra cualificada con conocimientos prácticos, así como la experiencia directa de los beneficios y ganancias que una empresa puede obtener de la implantación de herramientas 3D son los principales factores responsables de la lentitud en su adopción. Sin embargo, aquellos que han adoptado el 3D están impacientes por señalar que es una inversión que vale la pena realizar.
Según Eryn Gregory, propietario de Ergodesign y especialista en el campo de las aplicaciones 3D, las ventajas de utilizar herramientas virtuales en el desarrollo de productos hablan por sí solas. «El desarrollo de productos prácticamente ha ganado terreno en los últimos 3 a 5 años, a medida que los hábitos de consumo han ido cambiando. La necesidad de ofrecer productos nuevos de forma más rápida y con menos impacto ambiental ha obligado a las marcas de ropa a considerar seriamente cómo satisfacer esta demanda. Los procesos en 3D permiten a las marcas de moda en particular tomar mejores decisiones, de manera más rápida y con más confianza a lo largo de todo el ciclo de desarrollo», afirma. «Llevadas al siguiente nivel, las marcas de moda pueden realizar “pruebas de mercado” de estilos en sus sitios web sin tener que hacer nunca un prototipo físico o invertir en materias primas. Esta percecpión del consumidor tiene la capacidad de influir en qué prendas se incorporan a una colección y puede dirigir la cadena de suministro para crear solo lo que se pide a la vez que se elimina el despilfarro en el proceso», agrega.
Para que las marcas adopten con éxito la tecnología 3D, se necesitan nuevas formas de pensar y trabajar y, por supuesto, un nuevo conjunto de competencias de los empleados, lo que puede ser el primer y más grande obstáculo, según Gregory. «La adopción del 3D representa cambios en todas las facetas de la vida laboral: nuevas tecnologías que hay que aprender, nuevos procesos a los que hay que adherirse y, en última instancia, un resultado completamente diferente: un activo virtual frente a una muestra física. Es mucho pedir a un equipo de profesionales que probablemente han diseñado y desarrollado productos utilizando procesos heredados durante 10 o 20 años», comenta. El sector de la confección ha quedado rezagado con respecto a sus competidores en diseño industrial y arquitectónico con la adopción del 3D en gran parte debido a las limitaciones de los materiales de apariencia natural, "suaves", creados digitalmente, junto con la reticencia de una cadena de suministro existente que ha dependido de sistemas y procesos heredados profundamente arraigados. Pero, a medida que el 3D ha mostrado rápidamente sus beneficios en todo el espectro de diseño y desarrollo de prendas de vestir, se están comenzando a derribar cada una de estas barreras», añade.
Esto lo refleja Idy Lee, Vicepresidenta Senior de Li & Fung Sourcing, que ha estado ofreciendo servicios de 3D a clientes de todo el sector de la confección durante los últimos cuatro años. Lee confirma que el 3D está ganando terreno dentro de las empresas que entienden el valor de utilizar herramientas 3D para ayudar en la toma de decisiones iniciales, la creación de productos, la creación de prototipos y la planificación de líneas, y está de acuerdo con Gregory en que se necesitan competencias y formación adecuadas –incluidas en una estrategia digital más amplia– a fin de impulsar la transformación de las empresas hacia el 3D. «Adoptar una forma completamente nueva de trabajar y las características de las herramientas proporcionadas requiere una mentalidad completamente nueva y un compromiso centrado, además de una estrategia digital para implantar con éxito el 3D. Identificar el propósito del uso conducirá entonces a conocer qué competencias y formación se requerirán en dicha implantación. Con la evolución de la tecnología, es importante que los trabajadores comprendan los fundamentos para crear los cimientos del 3D y el conocimiento de la construcción en el sector de la confección».
Identificar y abordar el déficit de competencias en tecnología 3D dentro de una organización es, por lo tanto, clave para crear un marco adecuado y cosechar beneficios a largo plazo. Tanto Gregory como Lee están de acuerdo en que no se debe subestimar el impacto positivo de la adopción de la tecnología 3D en el negocio en general, así como su éxito y escalabilidad. «Más allá del ámbito del diseño y desarrollo en un ecosistema 3D, se reconocen los beneficios para el panorama empresarial en general. Los activos digitales de calidad que se están creando en la fase inicial del proceso son los mismos activos que se pueden utilizar al interactuar con el consumidor o el vendedor. La capacidad de una marca para reemplazar grandes cantidades de muestras físicas con una presentación en iPad de muestras virtuales tiene implicaciones drásticas para el entorno y el resultado final», dice Gregory.
Para muchas empresas, sin embargo, el cambio sigue pareciendo desalentador, ya que navegar por el mundo del 3D, construir una estrategia, establecer objetivos empresariales relevantes y aplicar las mejores prácticas parecen ser tareas complejas. Para abordar este problema, Gregory ha estado colaborando con el centro de conocimientos de la industria de la confección MOTIF para ofrecer un curso en línea, que se lanzará a principios de septiembre de 2019, y que ayudará a las empresas a embarcarse con confianza en este viaje de transformación. «Esencialmente, se trata de establecer un terreno de juego nivelado, familiarizando a los ejecutivos, gerentes y equipos con los conocimientos fundamentales, ayudándoles a crear su propio modelo de negocio para adoptar el 3D y equipándolos con un marco para allanar el camino hacia una implantación exitosa dentro de su organización», dice Gregory.
Entre las marcas que ya han implantado con éxito las herramientas 3D se encuentra el gigante estadounidense de ropa deportiva Under Armour, que ha comenzado a utilizar la virtualización 3D para reducir significativamente el tiempo y el coste del diseño y desarrollo del producto y minimizar el muestreo físico. Según Jami Dunbar, Vicepresidente de Desarrollo de ropa y accesorios y Operaciones de la cadena de suministro de Under Armour, el 3D es el futuro. «Indudablemente, el 3D está cambiando nuestra industria; todos en el comercio minorista están empezando a utilizar la tecnología», dice. «Y lo mejor de todo es que existe una gran colaboración entre las marcas. Todo el mundo protege su P.I., pero todos sabemos que trabajar juntos es el camino a seguir, y que todos vamos a poder visualizar y crear un gran producto», añade.
Idy Lee está de acuerdo: «A medida que la tecnología madure y se vuelva aún más fácil de usar, la adopción del 3D en la industria de la confección se acelerará», afirma.