Tendencias post pandemia: ¿cómo usarlas estratégicamente?

Buenos Aires – Es difícil hablar del post Covid cuando todavía la pandemia no terminó, pero qué tendencias se aceleraron en 2020 con todos los cambios que trajo a nivel global la crisis sanitaria, cómo cambió la mentalidad del consumidor y qué están haciendo las marcas para adaptarse a esta nueva realidad. Conversamos con Camila Straschnoy, fundadora de la consultora Mate House, experta en pronóstico de tendencias y profesora del IED Barcelona e Istituto Marangoni Miami. Straschnoy, además, acaba de lanzar un curso online sobre tendencias para aquellos interesados en identificarlas y usarlas como herramientas para planear estrategias de éxito en sus negocios.

¿Qué es una tendencia?

Podría definirla brevemente como un cambio de dirección. Lo que hacemos es estudiar patrones de comportamiento y ver hacia dónde están yendo. Las tendencias de consumo atraviesan tres componentes básicos: tenemos los agentes de cambio o drivers que en este caso podría ser el Covid-19, tenemos las necesidades básicas humanas y tenemos innovaciones que resuelven estas necesidades de nuevas maneras. No es que los humanos cambiamos o que el Covid nos cambió, sino que esto hizo que encontremos nuevas maneras de trabajar, de relacionarnos, de establecer una pareja.

¿Para que sirve conocer las tendencias?

Las tendencias nos ayudan a planificar y a ser estratégicos de una manera más eficiente y con ese espíritu es que las uso. La idea es usar las tendencias para generar algo que dé resultados, como un negocio que tiene como objetivo las ventas, por ejemplo.

¿Cómo influyó la pandemia en el surgimiento de nuevas tendencias?

El mundo cambió, pero hay algo de lo que venimos hablando desde el año pasado y es que lo que el Covid hizo fue acelerar las tendencias prexistentes. Los consumidores ya estaban adoptando estas tendencias y el Covid lo que hizo fue “echarle más leña al fuego”.

La pandemia nos obligó a repensar las sociedades, nuestras relaciones, nuestra economía, la forma cómo trabajamos. Hoy estoy con un espíritu más optimista, después del 2020, el 2021 nos da una oportunidad para reorganizarnos, ser estratégicos, para evaluar nuestros objetivos y para remarcarlos en un contexto actual.

Podríamos decir entonces que estamos en un escenario de nuevas posibilidades en una multiplicidad de aspectos.

Creo que todo esto nos dio la oportunidad de repensar muchas cosas. Con respecto a la industria de la moda, se dio algo positivo en un punto porque nos hizo replantearnos sobre las cantidades de sobre stock, excesos en la producción, calendario acelerado de moda, etc. Obviamente, también tiene su lado negativo si lo pensamos desde aquellos que se quedaron sin trabajo, o de la cantidad de gente que tuvo problemas de salud, o la pérdida de familiares y amigos, todo esto es una tragedia.

¿Desde este contexto de todo lo bueno y todo lo malo que trajo esta situación, qué tendencias se visibilizaron?

El tema de la penetración digital, por ejemplo. Ya estábamos comprando por internet y usando redes sociales para contactarnos. Pero la pandemia nos obligó de una manera disruptiva y obligatoria a hacer desde las compras diarias del supermercado hasta comprar moda online. Otro tema es el wellness o bienestar. Se trata de una macrotendencia que venía acelerándose hace mucho tiempo y hoy como el tema de la salud es una de las prioridades del consumidor, es algo a lo que se le está dando mucha atención. Si lo llevamos al tema de la moda, las marcas están haciendo cada vez más prendas para hacer ejercicios, líneas de loungewear o, desde otro ángulo, usan materiales antivirales o que impactan sobre el humor de las personas. La gente quiere sentirse bien.

También está cada vez más presente el tema de la sostenibilidad…

Sí, es algo que ya venía desde antes, hoy tenemos un approach mucho más lento a las cadenas de suministro, estamos reconfigurando cómo movemos la industria y con los consumidores replanteándose qué es para ellos comprar, qué hábitos de consumo les parece bien, son más sostenibles, más éticos y se ve un resurgimiento de la cultura del hágalo usted mismo. Siempre que hay una crisis económica hay un retorno a hacer más cosas en casa y eso también se refleja en la moda.

¿Cómo surgió la idea de hacer un curso sobre tendencias?

No veía que hubiera acceso a este tipo de información para la gente que no trabaja con estos temas particularmente. Yo trabajaba en Trendwatching, una de las agencias de tendencias más importantes del mundo, y tuve sus entrenamientos, además yo estoy formada en moda y marketing de moda, y no veía nada de todo esto unido en ningún lado. Así que se me ocurrió empezar a compartir esta información en una serie de cursos online y lancé el primero: “Using trends as your thinking partner”.

¿De qué se trata?

El curso tiene que ver con las tendencias y como se usan. Es para cualquier persona porque las cosas de las que hablamos ahí pueden aplicarse a todos los sectores: puede servirle a alguien que tiene un restaurante y a alguien que tiene una agencia de marketing digital, por ejemplo. La idea es entender qué le pasa a la sociedad y cómo podemos usar eso para hacer estrategias, hacer productos o brindar servicios que estén alineados a lo que quiera el consumidor ahora o en el futuro.

Fotos: Camila Straschnoy y Mara Kota, Anna Shvets, Vlada Karpovich, Ketut Suvishanto, Julia M Cameron para Pexels.com