SPFW N57 apuesta por la moda más original
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La 57ª edición de la Semana de la Moda de São Paulo (SPFW) - Sintonía, celebrada en los centros comerciales Iguatemi São Paulo y JK Iguatemi, destacó la esencia creativa y artesanal de las marcas emergentes. A pesar de contar con 11 desfiles menos que su predecesora, esta temporada de SPFW puso de relieve la relevancia de las marcas consideradas pequeñas, cuyo enfoque más autoral y artesanal resonó poderosamente en la audiencia.
Desde la apertura, con Aluf desfilando al son de la Orquesta Sinfónica de Heliópolis hasta Amapô, que cerró el evento (tras un cambio de último momento -estaba programada para preceder al desfile de João Pimenta, en el edificio Martinelli), lo que se vio en la pasarela puede desglosarse en las vertientes que siguen.
Artesanía sofisticada
El lujo del crochet hecho a mano, del tejido y de los bordados, algunos elaborados con escamas de pez, como se vio en el debutante Maurício Duarte, marcó la pauta. Catarina Mina, alineada con el trabajo artesanal, recordó la riqueza de los encajes nordestinos, en renda filé, de bilro y laberinto. Weider Silvério, veterano en el evento, presentó una colección cuyo punto fuerte fue el crochet. Marina Bitu trajo flecos de paja, telas teñidas con cáscara de granada y lentejuelas de bioplástico a gran escala. La preciosidad también se reflejó en el desfile de Lino Vilaventura, que mostró texturas obtenidas de plisados, bordados y patchwork, y en el masculino, looks monocromáticos, superpuestos en pantalones con faldas plisadas y chaquetas con capucha. En Thear destacaron los flecos de pétalos de tela, así como los estampados de tierra agrietada, en dorado, en el borde de los pantalones. La tapicería fue la base para la falda godet en Dendezeiro.
Formas cómodas y funcionalidad
Hace varias temporadas que las formas cómodas han tomado el lugar de las prendas ajustadas, pegadas al cuerpo. Casi todas las colecciones presentaron este tipo de formas, con pantalones rectos como en LED, en Rafael Caetano. La funcionalidad de los bolsillos múltiples apareció en masa, especialmente en los pantalones que nos recuerdan al estilo cargo de los años 80, pero con toques contemporáneos. Igor Dadona presentó una sastrería exquisita, al igual que en la moda masculina de Gefferson Vila Nova. João Pimenta llegó con pantalones amplios, con grandes bolsillos de encaje y tela de cuadros, innovando en la moda masculina. Forca Studio, por primera vez, presentó piezas de sportwear, con recortes orgánicos, mezcladas con sastrería.
Brillos, flecos y transparencias
Los destellos se vieron en varias prendas, como en la colección de Patrícia Vieira, que trabajó el cuero dorado en pétalas aplicadas, en un trabajo minucioso. La debutante Reptília trajo el brillo discreto del terciopelo en piezas más fluidas. Lilly Sarti llegó con flecos y cuero metalizado, con modelaje cómodo, en una colección sofisticada. Cria Costura mostró brillo en piezas glamorosas. Glória Coelho presentó piezas con flecos obtenidos de recortes de tela, transparencias sutiles y aquí y allá tiras sueltas, logrando volúmenes interesantes. Lino Vilaventura trajo transparencias mezcladas con brillo. André Lima, quien regresó después de 13 años de ausencia, exageró en los escotes, dejando los senos al descubierto, creando una mezcla de sensualidad y vulgaridad.
Este artículo fue publicado originalmente en FashionUnited.BR, y posteriormente traducido del portugués al español y editado.