Sebastian Dahlmanns, Jefe de Diseño de Viktor & Rolf: "¡No te rindas si no funciona a la primera!"

Sebastian Dahlmans trabaja en Ámsterdam en Viktor&Rolf. Su puesto como jefe de diseño en una marca de moda internacional, le aporta una visión de la vida fascinante. Desde FashionUnited hemos hablado con él, y nos ha contado qué cualidades busca en los becarios, qué errores hay que evitar y cómo empezar de la mejor manera posible en la industria de la moda.

¿Cómo empezó a diseñar?

"Hace once años me gradué de la Esmod de Berlín y nada más terminar presenté mi colección final en certámenes. Gané el premio a la innovación de Textil + Mode. Los certámenes son una buena forma de destacar, de ganar experiencia antes de solicitar un trabajo o unas prácticas. Cada año entran en el mercado miles de estudiantes de moda recién licenciados y sólo hay un número limitado de puestos de trabajo, por lo que recomiendo a todo el mundo que se presenten a todos los certámenes que puedan. Creo que me ayudó porque no venía de una de las mejores escuelas del mundo, como la Central Saint Martins, por ejemplo. Estudiar allí es prácticamente una garantía de trabajo en sí misma".

¿De qué trató su colección de graduación?

"Mi colección de graduación trataba sobre los Romanov (dinastía rusa gobernante desde el siglo XVII hasta principios del siglo XX), así que era muy glamurosa y opulenta; una colección femenina que ya se inclinaba un poco hacia la alta costura. A todos los que hacen prácticas con nosotros les digo: en vuestra última colección, haced lo que os apetezca hacer, no lo que creáis que se espera de vosotros. Pues este es el único momento de tu vida como diseñador en el que puedes hacer lo que quieras. ¡Adelante! La colección final es tu escaparate, tu entrada al mundo de la moda".

"Aconsejo a todo el mundo que haga lo que realmente le convenga. Ser fiel a sí mismo. Cuando trabajes para alguien te tocará adaptarte y comprometerte. Aunque lances tu propia marca, tienes que adaptarte a lo que compran tus clientes. Pero la colección de graduación es la oportunidad de mostrar tu talento y tu estética".

¿Sabía entonces dónde quería trabajar?

"Sí, lo sabía desde el principio. Mi estética ya era entonces, y sigue siendo, bastante parecida a la de Viktor&Rolf. Esto me permite crear diseños que me gustan personalmente y en los que puedo poner mi corazón y mi alma".

¿Qué pasó después de que te graduaras?

"Había solicitado unas prácticas en Viktor&Rolf y, por desgracia, no me aceptaron. Eso fue, por supuesto, muy decepcionante. Pero, por suerte, todavía tenía el dinero del premio y lo utilicé para financiar unas prácticas en Nueva York. Pero aún así quería trabajar para Viktor&Rolf. Así que después de las prácticas, volví a presentar mi solicitud y finalmente me contrataron. Pensé que me iba a mudar a Ámsterdam para tres meses y desde entonces han pasado ya diez años. (Risas) Así que: ¡no te rindas sólo porque no haya funcionado la primera vez!

¿Y cómo lo conseguiste al final?

"Creo que formamos una buena combinación en términos de estética. Y solicitarlo por segunda vez no es una vergüenza, sino una señal de que realmente lo quieres. A veces sólo hay que estar en el lugar adecuado en el momento adecuado".

¿Qué hace a un buen becario?

"Aconsejo a todo el mundo que sea visible, que muestre lo que puede hacer. Al mismo tiempo escucha y mira dónde puedes ayudar y hazte indispensable. Pues si no se encuentra el equilibrio adecuado puede ser negativo."

¿Cuál es el mayor error que puede cometer un becario?

"Pensar que el mundo de la moda te está esperando, o que eres la flor y nata. Conoce tu lugar. La confianza en sí mismo está bien si hay talento detrás. Pero no debe convertirse en arrogancia. Encuentra el equilibrio entre lo que puedes decir y cómo puedes decirlo. ¿Con quién debo hablar y cómo? ¿Dónde puedo ayudar, cuándo debo permanecer en el fondo? La gente ve cuando te esfuerzas. Si no tienes nada que hacer, limpia un poco. No te quedes quieto. Eso me ayudó a mí y es lo que les digo a todos mis becarios. Sé amable, muestra iniciativa, pero no seas prepotente, todo será recompensado".

¿Qué deben saber los graduados antes de entrar en el mundo de la moda?

"Que no es tan glamuroso. No nos limitamos a ser creativos y a dibujar todo el día. Hay que tener un gran conocimiento técnico. Tienes que ser capaz de decirle al patronista que algo no funciona, y cómo sí funcionaría. Intenta tener un poco de conocimiento de todo. Encuentra tu nicho y especialízate en él".

¿Cómo es su jornada laboral?

"Varía mucho. Trabajamos unos 15 proyectos en paralelo y las distintas fases del desarrollo de cada temporada. Por la mañana intento trabajar con los correos electrónicos y luego informo al equipo. A partir de ahí, la cosa se agita y va de una reunión a otra. Pero siempre intento dedicar la misma cantidad de tiempo a todos los proyectos y actividades en curso. En resumen, el trabajo es muy versátil y ningún día es igual".

¿Sigue dibujando a mano o hoy en día todo es digital?

"Los vestidos de novia los dibujamos todos a mano, las colecciones más comerciales las hacemos digitalmente. Ahora hay cada vez más programas en 3D que se pueden utilizar para diseñar, lo que me parece muy emocionante".

¿Qué ha cambiado el coronavirus en su trabajo?

"Antes de la pandemia, por supuesto, viajábamos más a menudo. Al menos dos veces al año iba a las ferias de tejidos, y a visitar a nuestros socios de producción en Nueva York, Taiwán y Tokio. Tenía la sensación de viajar casi todos los meses. Pero uno se acostumbra rápidamente a una nueva forma de trabajar y empieza a buscar la inspiración en otros lugares. Siempre se pueden encontrar aspectos positivos en una situación negativa. Ámsterdam es tan emocionante e interesante que no es necesario viajar para inspirarse. Echo de menos viajar a Tokio, y espero que llegue el momento de que eso sea posible de nuevo".

¿En qué se fija cuando contrata a alguien?

"Cuando contrato a alguien, intento no fijarme en la escuela, sino en la persona, en su portfolio, en la estética y sobre todo en la personalidad. Creo que siempre hay un lugar para la gente buena. Personalmente, me parece muy difícil contratar a alguien basándome en una o dos conversaciones. A veces tienes una gran química durante la entrevista y luego no encaja tan bien en el día a día. La personalidad es importante para mí porque al final del día puedes seguir trabajando en tus habilidades. Así que prefiero tener a alguien que todavía tiene que aprender algunas cosas aquí y allá, pero que encaja bien en el equipo, que a alguien que técnicamente puede hacerlo todo, pero que es súper arrogante".

Este artículo fue originalmente publicado en FashionUnited.DE, y después traducido y editado del neerlandés al español por Veerle Versteeg.