Armani ayuda a promesas jóvenes en Milán
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Como lo hace desde hace años, el estilista italiano Giorgio Armani recibió estee martes en su museo en Milán a jóvenes marcas promisorias, antes de cerrar la 'fashion week' con una colección masculina donde volvió a visitar a sus clásicos.
Armani ya tenía la costumbre de convidar a un joven diseñador a cada uno de sus desfiles, como hizo el año pasado con el malasio Edmund Ooi y antes con el griego Angelos Bratis o el italiano Lucio Vanotti. Esta vez fueron tres marcas jóvenes las que tuvieron el honor de presentar su trabajo en el Teatro Armani, el museo imaginado por el arquitecto japonés Tadao Ando y realizado en una vieja fábrica de chocolate. El lugar fue inaugurado en 2015 con motivo del 40º aniversario de la marca. "Milán está viviendo un momento de gran ebullición estética y cultural y la moda tiene una participación activa", declaró antes del lanzamiento de esta Fashion week Giorgio Armani, de 82 años, al explicar su voluntad de ampliar su iniciativa.
Para Carlo Capasa, presidente de la Cámara nacional de la moda italiana, que colabora en el acto, este proyecto da a "una nueva generación de estilistas una gran visibilidad internacional". "No se busca un vencedor sino ofrecer a cada uno la posibilidad de expresarse", dijo el martes antes de los desfiles de las tres marcas asiáticas: Yoshio Kubo, Moto Guo y Consistence. El primero, el japonés Yoshio Kubo, de 42 años, propuso 'looks' tatuados muy urbanos y relax con música heavy metal.
El modelo lleva un perfecto de cuero dotado de múltiples cremalleras con piezas de tejidos bordados en la parte baja de la espalda y un poco en los codos. Y para afrontar los fríos, nada mejor que una cobija-abullonada descuidamente llevada en bandolera. El malasio Moto Guo es más radical, como lo muestra su primer modelo, que hace una aparición muy saludada con un calzón y una almohada atada a la espalda tipo bolsa escolar. El universo infantil inspira su colección y el joven modelo lleva pantalones cortos con rayas delgadas, tipo piyama, gorras con hélices y zapatones.
A veces lleva alrededor del cuello un collar de grandes perlas o un ramo de flores en su abrigo de lana. "Lo que no es claro para el espectador, es nuestra mayor satisfacción", afirma la marca lanzada en 2015 y que mezcla "el vintage japonés con el romanticismo europeo". La última de las tres marcas en aparecer, Consistence, del joven taiwanés Tien Lu y la china Fang Fang, presentó una colección donde se asocian las ideas de imperfección y de inacabado.
Resultado: sacos o abrigos con cortes rectos y pespuntes aparentes. A veces no tienen envés y se terminan en bordes raídos. El estilo militar aparece jerseys con hombreras y pantalones kaki con bolsillos múltiples. Chaquetones de piel, suéteres con capucha o impermeable color arcilla, más clásico, completó el vestuario.
Armani neoclásico
Para Giorgio Armani, "textura y silueta" son las palabras claves. Su colección otoño-invierno 2017-2018, que cerró la semana de la moda de Milán, volvió a los clásicos del vestuario, sin grandes cambios. Mezclando hombres y mujeres, grandes "chales-mangas" que se enrollan alrededor de los brazos para anudarse en el pecho.
Un toque de originalidad en un océano de elegancia como ocurre siempre con Armani, una impresión de confort y de buen gusto en las prendas. Para el hombre, Armani presentó un pantalón con pinzas que cae en los tobillos, una chaqueta cruzada sin dobleces, un chaleco angora con capucha, con una clásica camisa blanca que "ilumina el rostro". Pero podrá contar tambien el próximo invierno con chaquetas de piel de cordero color burdeos o con larga pelambre, más osado. Para la dama, un chaleco de lana rosada que se lleva sobre una larga falda plisada. Pero podrá llevar también una chaqueta con capucha adornada con motivos de animales. (AFP)
Photos: Catwalkpictures