Zara cierra en pérdidas en Irlanda

Mal final de año el que ha firmado Zara, la principal cadena y el buque insignia del Grupo español Inditex, en lo que respecta a su mercado irlandés. País en el que la filial con la que opera la compañía española acaba de cerrar un complicado ejercicio de 2021, que termina firmando con una abultada disminución tanto en términos de ingresos como de beneficios. Unas caídas que se estiman que habrían sido como consecuencia directa de las continuas incertidumbres y de los riesgos que esta actual pandemia por coronavirus ha seguido representando para su negocio en esta isla de las islas británicas a lo largo de estos últimos 12 meses.

Así pues, en términos interanuales, la filial de Zara para Irlanda habría cerrado el año registrando unos ingresos totales por valor de 91,3 millones de euros. Cifra que representaría una caída del -16 por ciento, en lo que ha terminado llevando a la compañía a terreno negativo, cerrando el ejercicio con unas pérdidas totales por valor de 893.000 euros. Cantidad que contrasta con respecto al beneficio de +4,5 millones de euros que la filial de la cadena española llegó a sumar al cierre del mismo periodo de hace un año.

Según habrían manifestado desde la propia dirección de la filial de Zara para el mercado irlandés, estas caídas habrían sido fruto del “impacto significativo” que la pandemia ha tenido sobre su modelo de negocio. “Los cierres obligatorios de tiendas, las limitaciones de aforo y las restricciones a los viajes, han provocado una disminución de las ganancias y de la rentabilidad de la empresa”, habrían apuntado desde la dirección, a través de unas declaraciones recogidas por el medio de noticias irlandés Irish Independent.

Unas declaraciones de las que se valían igualmente para señalar el que, a pesar de terminar registrando ya pérdidas, la caída de las ventas se habría visto compensada en gran parte por el aumento de las ventas online, así como por la adopción de una serie de “decisiones de gestión” que habrían permitido reducir buena parte de los costes operativos de la compañía en el país.

Apertura de nuevos puntos de venta

A pesar de estas turbulencias en lo que respecta a su negocio para Irlanda, la misma dirección de la filial de la compañía habría asegurado que, lejos de llevar a cabo ninguna clase de ajuste sobre sus estructuras en el país, la compañía se encontraría trabajando en el estudio de nuevas oportunidades de cara a abrir nuevos puntos de venta.

En este sentido, Zara opera actualmente en Irlanda a través de un total de nueve puntos de venta, así como de su página de venta online. Estructuras entre las que se encuentran la tienda de Zara en el centro comercial Pavilions de la localidad de Swords, a las afueras de Dublín. Un espacio que la compañía ha aprovechado estos últimos meses de pandemia para remodelar, adaptándolo a la nueva imagen de marca y a las distintas soluciones en materia de omnicanalidad con la que la cadena está dotando a sus establecimientos de venta físicos.

De cara así pues al futuro de la compañía en el país, donde Zara da trabajo a una plantilla formada por 370 trabajadores, “en el caso de que no surjan circunstancias imprevistas, la dirección planea abrir más tiendas tan pronto como surjan las oportunidades adecuadas, y en la medida en la que compañía incremente su rentabilidad como resultado del continuo aumento de las ventas”, habrían asegurado desde la dirección de la filial de la compañía española para Irlanda.

Unas previsiones con las que evidencian su postura de entender como coyunturales y momentáneas estas pérdidas en las que ha incurrido este último año el negocio de Zara en el país. Un mercado en el que opera a través de esta filial, que ha llegado a percibir parte de las ayudas a los efectos de la pandemia decretadas por el Gobierno de Irlanda. Unas subvenciones que habrían ascendido hasta los 1,6 millones de euros, y que la dirección de Zara Irlanda habría destinado a hacer frente a los gastos de personal durante este último ejercicio financiero.