Superdry gana oxígeno y refinancia su deuda

En una última actualización financiera antes del cierre de este año, natural, de 2022, la multinacional de la moda británica Superdry ha dado a conocer las cifras generales obtenidas durante el primer semestre de su actual ejercicio fiscal de 2022/2023. Periodo de 26 semanas finalizado el pasado 29 de octubre, que la compañía llegó a completar elevando sus niveles de facturación, mientras sus órganos de dirección se afanaban en lograr cerrar a contrarreloj una refinanciación de su deuda, ganando como resultado oxígeno para que la multinacional pueda seguir mejorando y saneando sus estructuras, del mismo modo que lo ha venido haciendo hasta ahora.

Empezando por la primera de estas cuestiones, en términos de facturación, y a la espera de que desde la multinacional terminen haciendo públicas las cuentas detalladas de este primer semestre de ejercicio, Superdry habría cerrado los seis primeros meses de su actual ejercicio fiscal elevando sus ingresos un +3,6 por ciento sobre sus niveles de 2021. Periodo para el que sus ventas llegaron a registrar unos niveles de facturación por valor de 277,2 millones de libras, un -1,95 por ciento menos que con respecto a los 282,7 millones de libras de 2020, así como un -24,9 por ciento por detrás de los 369,1 millones de libras registradas durante el mismo periodo de 2019. Una evolución que por tanto, y a la espera de los posibles efectos que sobre su operatividad hayan podido terminar ejerciendo las actuales presiones inflacionistas, ya dejan a la multinacional de la moda británica, si bien recuperando parte de todo lo perdido durante estos últimos años de pandemia, todavía muy por detrás de los niveles prepandemia registrados durante su ejercicio de 2019/2020. Último año que llegó a completarse al margen de los efectos del virus del coronavirus, así como el primero tras el regreso, no sin polémica, de Julian Dunkerton, fundador de Superdry, al puesto de director ejecutivo de la cadena de moda.

“Estoy satisfecho con el comportamiento recogido durante la primera mitad del ejercicio”, no dudaba en remarcar el propio Julian Dunkerton a través de unas declaraciones hechas públicas por la propia compañía británica. “Está bien documentado que las condiciones son extremadamente desafiantes, y que no se han visto especialmente favorecidas por el clima inusualmente cálido que se ha dado en octubre y hasta noviembre”. “Sin embargo”, apunta Dunkerton, “combinando un excelente producto con unos precios razonables, logramos aumentar las ventas durante el primer semestre”.

Crecimiento en todos los canales de venta minorista

Entrando a profundizar sobre los principales aspectos que han marcado la evolución de la compañía durante este primer semestre de ejercicio, por canales, ese incremento del +3,6 por ciento de sus ventas, a nivel global, ha venido alimentado especialmente por el buen rendimiento experimentado por el canal minorista de Superdry, cuyas ventas han llegado a dispararse hasta un +9,6 por ciento. Un aumento que ha servido para compensar la caída del -5,2 por ciento de las ventas experimentada dentro del canal mayorista, e incremento que se ha dado favorecido por una recuperación de los flujos en tienda que ha permitido elevar los niveles de ingresos en los establecimientos de Superdry hasta en un +14,4 por ciento. Una subida que se ha dado mientras igualmente se mantenían los buenos registros sobre un canal online, cuyas ventas por su lado han aumentado un +1,7 por ciento.

“Nuestra colección AW22 ha sido muy bien recibida por los clientes, especialmente nuestra gama de chaquetas y vestidos de fiesta, y resulta fantástico ver que las ventas en las tiendas se están recuperando bien”, añade Dunkerton. “También me anima la manera en la que hemos empezado el segundo semestre, durante el que se ha dado nuestra mayor semana de pedidos de comercio online”, y que se estaría viendo “impulsado por el regreso a los niveles de récord en la venta de chaquetas durante el periodo del Black Friday”, así como por el “buen impulso” sobre las ventas que estaría provocando un “clima más frío”. No obstante, “no nos hacemos ilusiones”, puesto “que la confianza de los consumidores es frágil” y “la imagen pueda cambiar rápidamente”.

Refinanciación de la deuda

Poniendo ya el foco de atención sobre esa refinanciación de su deuda que ha llevado a cabo la compañía, según detallan desde Superdry, la multinacional de la moda británica contaba con un préstamos basados en activos por hasta 70 millones de libras, cuyo vencimiento estaba marcado para finales del próximo mes de enero de 2023. Un crédito que finalmente han logrado remplazar, eso sí a una tasa de interés más alevada, con la apertura de una nueva línea de crédito por valor de 80 millones de libras, en la que se incluye ya la formalización de un nuevo préstamo a plazos por valor de 30 millones de libras, cerrada con la firma especializada Bantry Bay Capital Limited, y con vencimiento a tres años, con posibilidad de marcar una prórroga por un año más.

Se trata esta de una herramienta de financiación que permitirá a la multinacional de la moda británica beneficiarse de una mayor flexibilidad a la hora de seguir adelante con sus operaciones, así como de avanzar en su objetivo por “ser el destino de moda sostenible nº1”. Metas para las que se seguirán sirviendo de una estructura comercial formada por una red integrada por 219 tiendas físicas y por su presencia en cerca de otros 450 puntos de venta franquiciados y operados con licencia, repartidos por más de 50 países. Una red de ventas cuya buena operatividad ha permitido a Superdry reducir, desde el 1 de octubre al 20 de diciembre, en más de 25 millones de libras su deuda neta, para terminar dejándola en cerca de unos 13 millones de libras.

“Estamos muy contentos de haber completado nuestra refinanciación”, destaca Dunkerton. “Esto, combinado en el fortalecimiento continuo de nuestra marca y productos, significa que el negocio está en buena forma mientras operamos en nuestro importante periodo de compras de Navidad”.