Puma cierra ejercicio en récord histórico de facturación y rentabilidad
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La multinacional de origen alemán Puma, compañía líder del sector de la moda y de los artículos deportivos, acaba de dar a conocer esta misma mañana sus cuentas relativas a su último ejercicio completo de 2021. Periodo anual finalizado el pasado 31 de diciembre, que la popular compañía deportiva ha logrado firmar en un registro en máximos históricos tanto de rentabilidad como de facturación, y ello a pesar de los permanentes retos que han seguido dominando en la escena internacional a lo largo de todo el ejercicio, a cuenta tanto de los efectos derivados por esta actual pandemia por coronavirus como de las crecientes tensiones geopolíticas.
Tras un último cuarto trimestre en el que las ventas siguieron la tendencia al alza manteniéndose por encima de sus valores prepandemia, Puma ha logrado cerrar el ejercicio con una facturación total por valor de 6.805 millones de euros. Cantidad que representa un crecimiento del +30 por ciento con respecto a los 5.234,4 millones que la compañía llegaba a generar al cierre del complicado ejercicio de 2020; así como igualmente un +23,68 por ciento más que con respecto a los 5.502,2 millones de facturación que la compañía recogía al cierre de su ejercicio de 2019.
Como resultado de este aumento de sus ingresos, la compañía deportiva ha logrado disparar su rentabilidad hasta unos beneficios antes de intereses e impuestos (Ebit) por valor de 557,1 millones de euros. Logrando como respuesta unos beneficios netos por valor de 309,6 millones de euros, que se sitúa un +292,4 por ciento por encima del beneficio por únicamente 78,9 millones que lograba reunir al cierre de 2020; cifra que igualmente es un +17,99 por ciento superior a los 262,4 millones de beneficios que Puma lograba durante su último ejercicio de 2019 previo a esta pandemia por coronavirus.
“2021 ha sido un amo repleto de éxitos para nosotros”, no ha dudado en remarcar Bjørn Gulden, director ejecutivo de Puma, a lo largo de unas declaraciones difundidas desde la propia compañía alemana. “A pesar de los problemas y de los obstáculos relacionados con el Covid-19 y de las tensiones políticas en todo el mundo, hemos obtenido el mejor año en la historia de Puma”. “El crecimiento del +32 por ciento de las ventas hasta los 6.805 millones de euros y el crecimiento del +166 por ciento del Ebit hasta los 557 millones de euros, son resultados de los que estamos orgullosos”.
En alerta frente a los posibles efectos derivados de la pandemia, de una inflación disparada y de las crecientes tensiones geopolíticas
De cara a este próximo ejercicio de 2022 en el que se encuentra ya inmersa la multinacional deportiva, a pesar de las incertidumbres que siguen planeando en la escena internacional, desde Puma confían en seguir creciendo sobre su modelo de negocio. Esperando como respuesta un fuerte crecimiento de las ventas y de los beneficios, anticipando como resultado un Ebit que esperan lograr situar en la horquilla comprendida entre los 600 y los 700 millones de euros, frente a los 557 millones en los que ha cerrado este último ejercicio de 2021.
En este mismo sentido, los gastos operativos de la compañía para este 2022 “seguirán dependiendo en gran medida del grado de incidencia y de la duración con la que siga impactando la pandemia por Covid-19 en nuestras ventas”, explican desde Puma. “Si bien continuaremos enfocándonos en nuestro impulso hacia el crecimiento brindando a nuestros socios minoristas y consumidores nuestros mejores servicios, esperamos que la presión inflacionaria reflejada en mayores tarifas de fletes y precios de materias primas, además de las ineficiencias operativas derivadas del Covid-19, tengan efectos sobre nuestra rentabilidad en 2022”. A este respecto, “en línea con los ejercicios anteriores, Puma continuará maniobrando a través de estos desafíos, aprovechando el impulso de su marca, las sólidas asociaciones que mantiene con proveedores y minoristas, y su modelo operativo flexible”.
“En el arranque de 2022, el Covid-19 desafortunadamente todavía sigue afectando negativamente a nuestra cadena de suministros, las presiones inflacionarias están teniendo un impacto negativo en nuestros costes y márgenes operativos, y la situación geopolítica sigue siendo muy tensa”, detalla el director ejecutivo de Puma. Es por ello que “tendremos que continuar con nuestro arduo trabajo en este difícil entorno, pero sigo siendo muy optimistas sobre el futuro de nuestro sector en general, y de Puma en particular”. “Nuestro continuo impulso como marca, la fuerte demanda de nuestros productos y las buenas respuestas que estamos recibiendo por parte de nuestros socios minoristas, me hacen ser muy optimista”.