NYFW: La moda entra en resistencia frente a Trump
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El mundo de la moda en Estados Unidos se adentró aún más en la política el lunes con el desfile de puños en alza de Mara Hoffman, el homenaje de Proenza Schouler a las protestas y el ejemplo de diversidad de la chilena María Cornejo. Desde el primer día de la Semana de la Moda de Nueva York, el jueves pasado, se han visto en las pasarelas bandanas blancas, llamados a la unidad, prendedores rosas en apoyo a la planificación familiar y con Public School, gorros de béisbol rojos para desviar el eslogan del presidente Donald Trump.
Frente al proteccionismo y al discurso agresivo de Trump, la industria se ha unido en torno a valores universales como la fraternidad y la tolerancia. La diseñadora neoyorquina Mara Hoffman endureció el tono el lunes al invitar en el inicio de su desfile a las cuatro fundadoras de la Marcha de las Mujeres del 21 de enero a leer un manifiesto por los derechos de la mujer. La marcha reunió A medio millón de personas en Washington DC, según los organizadores, y cientos de miles más por todo el país.
Linda Sarsour, que usa velo, Bob Bland, que amamantaba su bebé, Tamika Mallory, que es negra, y Carmen Pérez, que es de origen mexicano, llamaron el lunes a las mujeres a la solidaridad, la defensa de los más "marginalizados", a aceptar las diferencias, pero también a luchar. Para aquellas que "son retenidas en los aeropuertos", "tras las rejas", "las mujeres musulmanas", "las que vinieron, y las que no pudieron", dijeron una por una, en referencia a la política de Trump contra los inmigrantes. Las cuatro mujeres fueron ovacionadas. Presente en Washington para la Marcha de las Mujeres, al igual que Cornejo, Mara Hoffman explicó a la AFP que desea "iluminar a las personas que hoy lo necesitan".
Para la diseñadora, su marca, lanzada en el año 2000, fue siempre la ocasión de "reforzar y valorizar" a la mujer, aseguró, recordando que 29 de los 30 empleados de la empresa son mujeres. "Era simplemente la ocasión de hablar un poco más fuerte", dijo, "en un momento en que la empresa necesita este aliento, este latigazo".
"Expresarme ahora"
Los dos diseñadores de Proenza Schouler también quisieron aprovechar esta energía que se ha apoderado de las grandes ciudades de Estados Unidos, y del mundo, desde la llegada de Trump al poder el 20 de enero. Para su último desfile estadounidense antes de partir a París, celebraron "todo lo que aman en Nueva York", sobre todo esta tendencia a la acción. "Para nosotros no es el momento de quedarse en casa en bata y pantuflas", explicó Lázaro Hernández, cofundador de la marca que representa el sector más cerebral de la moda. "Es el momento de calzarse los zapatos chatos y una campera de cuero, de salir afuera (...) y de luchar por las cosas que queremos y las cosas que son justas", agregó.
Más silencioso que durante todas las primeras semanas de la la joven presidencia Trump, el mundo de la moda quiere ahora influir en el debate, a imagen y semejanza de Tadashi Shoji el jueves, Raf Simons para Calvin Klein el viernes y del dúo de Public School el domingo. "Me gusta hablar ahora porque puedo usar mi voz", a diferencia de los millones de hispanos que están bajo amenaza de una deportación, explicó el lunes a la AFP la diseñadora chilena María Cornejo, fundadora de Zero+María Cornejo, tras su desfile. "Y hay que usarla", añadió. Cornejo envió por la pasarela a modelos de 16 países diferentes, en un ejemplo de diversidad. La determinación también se vio en las vestimentas. María Cornejo, Phillip Lim y Mara Hoffman celebran una mujer al poder, que toma sus propias decisiones y las asume. El diseñador Phillip Lim quiere ofrecer en su colección la posibilidad a la mujer de ser "simplemente ella misma". Cornejo aseguró que diseñó para una "mujer fuerte" que "no precisa vestirse como un hombre para serlo".(AFP)