Nextil aumenta su capacidad de producción en lujo con la compra de la portuguesa Keupe

El grupo español Nextil, uno de los principales agentes de la industria textil europea, ha firmado la adquisición de la portuguesa Keupe, que con sede en Ponte de Lima, es especialista en la producción de prendas de lujo.

Esta decisión, valorada en 225 000 euros, tiene como objetivo incrementar en un 20 por ciento la capacidad productiva de la unidad de prendas de lujo de Nextil, con un modelo de fabricación propia que se ajuste a los estándares comunes de calidad.

En su comunicado han hecho hincapié en que la operación se enmarca en el contexto de la estrategia del Grupo de incorporar compañías que aporten “valor a cada una de las fases del negocio y consolidar nuestro posicionamiento en el sector”.

Keupe es la tercera incorporación portuguesa al portfolio de Nextil que, además de contar con varios centros de trabajo en tierras lusitanas, en 2018 se hizo con SICI93 y Playvest, con sede en Braga.

Las cifras derivadas de la puesta en práctica de esta estrategia están siendo muy positivas y “la cartera de pedidos en septiembre de 2021 fue un 250 por ciento superior a la de 2020 en las mismas fechas, alcanzando los 15 millones de euros de cartera de pedidos firmados”, según el Informe de gestión del Grupo de acuerdo al tercer trimestre de 2021, en el que también figura que las ventas, y con ella la rentabilidad de la empresa, anotaron un resultado de explotación positivo de 48.000 euros durante los nueve primeros meses del año, frente a las pérdidas de 8 millones de euros en el mismo periodo de 2020.

“A pesar del incremento del precio de las materias primas, la energía y el transporte, el Ebitda acumulado a septiembre creció un 498 por ciento hasta los 3,2 millones de euros”, explicaba Nextil en el documento.

La compañía cerró el pasado 2021 con una facturación de 44,8 millones de euros, ejercicio en el que el Grupo registró un resultado de explotación positivo de 0,048 millones de euros en los nueve primeros meses del año, frente a las pérdidas de 8 millones sufridas el mismo periodo del año anterior. En septiembre el ebitda acumulado creció un 498 por ciento, hasta los 3,2 millones de euros, a pesar del incremento del precio de las materias primas, la energía y el transporte.