Los trabajadores de Textil Lonia activan el calendario de protestas y llaman a la huelga

Madrid – Ante la falta de avances en las negociaciones entre la dirección y los representantes de sus trabajadores, finalmente ha estallado el conflicto laboral en la multinacional textil gallega Sociedad Textil Lonia (STL). Empresa participada en un 25 por ciento por el grupo Puig, cuya plantilla de su sede central se encuentra ya inmersa en mitad de un aguerrido calendario de paros y protestas, que desembocará en la huelga de 24 horas que ha sido convocada para el próximo lunes, 5 de enero de 2026.

Tratando de reflejar y canalizar el descontento generalizado que parece reinar entre las filas de la compañía textil, propietaria de la firma Christian Lacroix y responsable del desarrollo de las marcas Purificación García y CH Carolina Herrera, los tres sindicatos representativos de los trabajadores de su sede central, Comisiones Obreras (CCOO), la Unión General de Trabajadores (UGT) y la Confederación Intersindical Galega (CIG), diseñaron como elemento de presión frente a la dirección un firme calendario de protestas coincidiendo con esta recta final del año. Una hoja de movilizaciones cuyo arranque, previsto para el pasado lunes 22 de diciembre, accedieron a aplazar, después de que desde la dirección les informasen de su compromiso de presentar un paquete sustancial de mejoras de las condiciones laborales de la plantilla. Una propuesta que se les terminó por remitir el pasado 23 de diciembre, según adelantan desde el medio generalista local de La Voz de Galicia, siendo tildada entonces de “irrisoria” por una representación sindical que, a la vista del incumplimiento que apreciaban sobre ese “compromiso” previamente dado, se decidieron finalmente a activar el calendario de protestas.

Marcando así el inicio de este último conflicto laboral entre la dirección de STL y la plantilla de su sede central, una planta ubicada en la localidad de ourensana de Pereiro de Aguiar en la que trabajan unos 800 trabajadores, el pasado miércoles, 24 de diciembre, día de Nochebuena, tenía lugar el primero de los paros parciales convocados por los sindicatos. Un acto de protesta que se prolongó desde las 11:00h de la mañana hasta las 13:00h del mediodía, mismo intervalo de dos horas para el que se mantienen programados los nuevos paros que han sido llamados a secundar los trabajadores durante este mismo lunes, 29 de diciembre, e igualmente durante la jornada del próximo miércoles, 31 de diciembre, día de Nochevieja. La última de las jornadas de paros parciales que está previsto que lleguen a realizar los trabajadores de la sede central de STL, antes de escalar el conflicto y secundar la huelga de 24 horas que ya ha sido programada para el próximo lunes 5 de enero, víspera del Día de Reyes. Una acción sindical sobre la que las tres organizaciones convocantes ya advierten a la dirección de STL de que no será más que el punto de partida hacia un nuevo escalado del conflicto, que no dudarán en intensificar si no se avienen a presentar unas propuestas de mejora “serias y reales”, y a hacer a un lado su estrategia de “imposición y bloqueo”.

Unas condiciones acordes con la realidad de la empresa

Como argumentos sobre los que sustentan cada una de estas reivindicaciones, y a las que supeditan de este modo el seguir adelante y escalando en este conflicto laboral, los sindicatos censuran en primer lugar la falta de decisión y compromiso que muestra la dirección de STL ante la necesidad de abordar una sustancial mejora de las condiciones laborales, y salariales, de los trabajadores. Una revisión al alza de su marco laboral, para el que reclaman unos salarios dignos y unas condiciones laborales que vayan acorde con las cuentas de la multinacional textil.

Junto a esas reclamaciones, que defienden como de tan necesarias como justas, igualmente denuncian desde la representación sindical, primero, que a pesar de la buena situación económica de la compañía la dirección mantenga una política de salarios fijados en el mínimo que exige el convenio colectivo sectorial; y segundo, el que además lo haga practicando una política negociadora con la que tratan de socavar los derechos laborales de sus trabajadores. Unas dinámicas desde las que precisamente se ha tratado de desactivar este conflicto laboral, tal y como han señalado los sindicatos al apuntar sobre cómo desde la dirección de STL condicionaron la celebración de una reunión de negociación para la jornada del 24 de diciembre, a que previamente se desconvocase el paro parcial programado para ese primer día de protestas. Una demanda que califican como de “chantaje inaceptable”, y de exigencia que deja al descubierto cómo desde la dirección pretenden vulnerar un derecho como el derecho fundamental a la huelga de los trabajadores.

Con una caída del -30 por ciento del beneficio

A pesar de que la representación sindical esgrime como principal estandarte para sus reclamaciones la buena y sólida realidad económica de la compañía, y que es la que permitió la adquisición a comienzos de año de la casa Christian Lacroix, lo cierto es que los estados financieros de la sociedad, aunque claramente en positivo, experimentaron un igualmente claro retroceso durante el ejercicio completo de 2024. El último sobre el que se disponen de cifras consolidadas, y año que Sociedad Textil Lonia cerró con una caída de los ingresos hasta los 414,61 millones de euros (-3,67 por ciento); del resultado operativo hasta los 48,43 millones de euros (-36,85 por ciento); y del beneficio neto hasta los 37,36 millones de euros (-30,18 por ciento).