Los trabajadores de la confección revelan el empeoramiento de los derechos humanos en un nuevo informe
cargando...
Un nuevo informe del Centro de Información sobre Empresas y Derechos Humanos ha puesto de manifiesto las acusaciones de represión sindical y de abusos de los derechos humanos contra los trabajadores de la confección en los proveedores de una serie de minoristas de moda mundiales.
Como parte del informe, la organización entrevistó a 24 líderes sindicales y encuestó a 124 activistas sindicales y laborales en Bangladesh, Camboya, India, Indonesia y Sri Lanka.
Según el informe, se presentaron denuncias en 13 fábricas que suministran o han suministrado a al menos 15 marcas de moda internacionales, entre las que se encuentran Adidas, Bestseller, C&A, H&M, Hugo Boss, J. Crew, Mango, Next, Primark y Under Armour.
Los encuestados dijeron que habían seguido enfrentándose a la discriminación, las amenazas, la violencia, las acusaciones falsas y las detenciones, y que muchas de las fábricas en cuestión aparentemente utilizaban la pandemia por coronavirus como medio para estos supuestos intentos de suprimir cualquier esfuerzo de organización.
Aumento de la intimidación y la violencia de género
Alrededor del 61 por ciento de los encuestados informó de que la situación de la libertad de asociación y la negociación colectiva había "empeorado" desde la pandemia.
Además, casi la mitad de los encuestados había observado un aumento de cuestiones como la intimidación y el acoso a los miembros de los sindicatos.
La Comisión de Derechos Humanos de Hungría afirmó que la supresión de los derechos sindicales, que había aumentado al principio de la pandemia, se había convertido hoy en "la norma", causando "impactos devastadores para los trabajadores de la confección".
Señaló que, sin el nivel adecuado de protección, las trabajadoras se enfrentaban a salarios decrecientes, condiciones laborales precarias, horarios más largos y abusos en la fábrica.
Esto se reflejó en los datos recogidos, según los cuales el 30 por ciento de las encuestadas había informado de un aumento de la violencia de género.
Más de la mitad también había revelado un aumento del robo de salarios e indemnizaciones como consecuencia de las restricciones a los derechos sindicales.
En un comunicado relacionado con el informe, el Centro de Información sobre Empresas y Derechos Humanos hizo un llamamiento a los gobiernos, las marcas y los proveedores para que tomen medidas que garanticen la protección del derecho a la libertad de asociación en todas las cadenas de suministro.
La organización añadió que sus datos mostraban la necesidad de introducir marcos obligatorios de diligencia debida en materia de derechos humanos, así como un compromiso proactivo de las marcas con los proveedores.
Concluyó: "Se anima a las marcas y a los proveedores a entablar un diálogo de buena fe con los trabajadores y sus representantes mediante la negociación colectiva y los acuerdos vinculantes entre las principales partes interesadas".
Este artículo fue publicado originalmente en FashionUnited.UK, y posteriormente traducido del inglés al español y editado por Alicia Reyes Sarmiento.