Intersport Francia ultima la compra de la filial española por 300.000 euros

Intersport Francia se perfila como la futura propietaria de la marca y la central de compras de su homóloga española. Según ha avanzado Modaes, la filial gala ha presentado una oferta de 300.000 euros, que incluye la adquisición de activos, parte de los proveedores y la integración de una porción significativa de la plantilla. La operación, aún pendiente de la aprobación judicial definitiva, marcaría el cierre del proceso concursal de la compañía en España y garantizaría la continuidad operativa de la enseña en el mercado ibérico.

La propuesta francesa es, de hecho, la única presentada ante el administrador concursal dentro del lote principal, que comprende la marca, la central de compras y una parte sustancial de los recursos humanos. De aprobarse, supondría el desenlace de varios meses de incertidumbre desde que, el pasado marzo, Intersport España —central dedicada a la moda y el equipamiento deportivo— se declarara en concurso de acreedores.

El interés de la filial francesa por controlar los activos españoles no es nuevo: fuentes del sector apuntan a que las conversaciones se remontan a antes del proceso concursal, cuando ya se exploraba la posibilidad de asumir la licencia de distribución y la participación de la filial española en la matriz suiza. No obstante, aquellas negociaciones iniciales no prosperaron debido a que la parte española rechazó una oferta que no contemplaba la asunción de deuda.

Durante el verano, la compañía trató de evitar la liquidación mediante un plan de viabilidad que proponía quitas de hasta el 70 por ciento sobre un pasivo estimado entre 14 y 30 millones de euros repartido entre distintas sociedades. Sin embargo, tras dos meses de negociaciones con un pool de acreedores —entre los que figuraban grandes bancos y proveedores estratégicos como Nike y Puma—, el intento de rescate fracasó y la empresa inició formalmente su liquidación.

La adquisición por parte de Intersport Francia representa un paso estratégico en la consolidación del grupo dentro del mercado ibérico. La compañía opera bajo un modelo cooperativo que agrupa filiales nacionales con gestión independiente, unidas por la búsqueda de una mayor capacidad de negociación con las marcas globales. Mientras tanto, el resto del negocio español —principalmente la red de tiendas— se ha dividido en catorce lotes, mayoritariamente por criterios geográficos, que continúan en proceso de recepción de ofertas.

La operación encaja con la estrategia de crecimiento y fortalecimiento que Intersport Francia impulsa a escala europea. La cooperativa cerró 2024 con un incremento del 6,3 por ciento en su facturación, hasta los 3.880 millones de euros, impulsado en parte por la integración de su competidor Go Sport y un alza del 16 por ciento en las ventas online. De cara a 2030, el grupo proyecta alcanzar los 5.500 millones de euros y prevé invertir entre 70 y 100 millones en los próximos tres años para reforzar su propuesta omnicanal y unificar su red comercial.