El Consejo Intertextil alerta de los efectos por el alto precio de la energía: “Muchas empresas se están planteando cerrar”

A la espera de que comience a concretarse, y si es que termina haciéndose y en qué grado, la importante bajada de impuestos prometida este lunes por el presidente del Gobierno Pedro Sánchez, y que el Consejo de Ministros en cualquier caso no aprobará hasta su reunión del próximo 29 de marzo, el Consejo Intertextil Español ya ha comenzado a alertar de las graves consecuencias para la industria que está teniendo el precio en máximos del suministro de la energía. Un sobrecoste que está poniendo en serias dificultades la viabilidad de muchas empresas del sector, que estarían ya planteándose el cerrar sus puertas y el paralizar su actividad, al no poder hacer frente al incremento de los costes.

Poniéndonos en antecedentes, desde el Consejo Intertextil Español (CIE) explican cómo la invasión de Ucrania por parte de Rusia ha terminado haciendo que el coste del suministro de la energía, y en especial del gas, se haya terminado mostrando como del todo inasumible para las compañías del sector del textil y de la moda. Unas industrias que en el momento que comenzaban a experimentar una tímida recuperación de la producción y de sus niveles de facturación tras la grave crisis económica y sanitaria provocada por la pandemia por coronavirus, se están viendo nuevamente asfixiadas ante las continuas subidas de los precios de las materias primas, del transporte y de la logística, así como de los costes derivados de la electricidad y del gas. Una fuente de energía esta cuyo precio ya había comenzado a experimentar un considerable incremento antes de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, en lo que ha terminado ahora acelerándose hasta el punto de hacer de ella un recurso inasumible para las empresas del sector, que ven así puesta en peligro la viabilidad de sus modelos de negocio.

“En este contexto, la industria textil y de la confección se enfrenta a una situación sin precedentes”, en la que “muchas empresas se están planteando cerrar la producción debido a los costes energéticos”, alertan desde el CIE a través de un comunicado oficial. “Si el precio del gas ya había sufrido un incremento que ponía en serio peligro la viabilidad de las empresas textiles de acabados, la invasión de Ucrania ha supuesto que el coste del suministro sea del todo inasumible para una industria que mostraba signos de asfixia”, añaden, en lo que está afectando “especialmente a las empresas del subsector de acabados, dado su elevada dependencia del gas”.

Reclamación de medidas urgentes

Como asociación en torno a la que se agrupan y desde la que se encargan de representar los intereses de un total de 3.633 empresas que dan trabajo a casi 46.000 profesionales y que generan una cifra de negocio por valor de 5.217 millones de euros, desde el CIE se han encargado ya de trasladar a representantes de la Administración española la inquietud y la alarma que reina en el sector frente a este panorama. Unas circunstancias para las que reclaman al Gobierno de España y a su administración, así como a las instancias europeas, que comiencen a poner de manera inmediata soluciones de carácter urgente que permitan a las industrias del sector seguir adelante con su actividad.

“Una importante representación de las empresas afectadas se ha reunido esta semana con los responsables del Consejo Intertextil, transmitiendo su preocupación por una situación límite y por la falta de apoyo para superarla”. Ante esta insuficiente respuesta que están dando las administraciones públicas con respecto a una situación de emergencia y excepcionalidad que parece que no tiene visos de llegar a corregirse por si sola, “la patronal textil ha trasladado la inquietud de los empresarios a altas instancias de la Administración Española”, a la que reclama, al igual que frente a la administración europea, que “pongan en marcha de forma inmediata, medidas urgentes que permitan mantener la actividad de las empresas textiles, ante el incremento desorbitado de los precios de la energía”.

De no ser así y llegado el caso de que no lleguen a aprobarse las medidas que permitan la pronta corrección del desorbitado coste de la energía, desde el CIE alertan de que “si no se actúa de inmediato, muchas empresas tendrán que paralizar su actividad y no podrán volver a su actividad productiva hasta que la situación vuelva a la normalidad”. Un extremo que conlleva, avisan, “el peligro añadido de la pérdida de miles de puestos de trabajo”.