Continúa la sangría de empresas textiles que abandonan Cataluña por la incertidumbre política

El 21 de diciembre los 5.553.983 millones de catalanes que tienen derecho a voto tienen una cita histórica con las urnas: elegir al nuevo gobierno regional y con el, el rumbo que tomara la comunidad autónoma, incluyendo la posibilidad de revisar su postura sobre una posible independencia.

En los últimos dos meses, más de 3,000 empresas de todos los sectores han decidido irse de la región para evitar las posibles repercusiones negativas de una posible independencia catalana, según datos del Colegio de Registradores de España.

Tan sólo en octubre, 1.982 sociedades cambiaron de domicilio social, según datos recogidos por ‘Intereconomía’. Desde entonces, el ritmo diario se rebajado de 100 a 20 empresas. Las salidas superan ya las 3.100 empresas, según los últimos datos del Colegio de Registradores de España.

El sector textil, entre los más afectados por la crisis política en Cataluña

Estas son algunas de las empresas de la industria textil que han cambiado Cataluña por otras regiones españolas para registrar su sede o incluso, su negocio:

La primera empresa del sector textil y de moda en trasladar su sede socia tras la votación por la independencia de Cataluña celebrada el pasado 1 de octubre fue la cotizada Dogi. La empresa fundada por la familia Domènech comunicó en aquel momento - por medio de un hecho relevante al regulador del mercado (CNMV) - su decisión de trasladar su sede social a Madrid. La decisión, según reza el comunicado, había sido adoptada en una reunión extraordinaria de su consejo de administración “con el fin de optimizar sus operaciones y la relación con sus inversores”.

Punt Roma, propiedad del empresario Carlos García Blanchart, quien fundó el negocio en 1976. La cadena textil cuenta con unos 400 puntos de venta repartidos por 25 países y una facturación anual de 150 millones de euros. Tal y como recoge ‘Cronica Global’, Punt Roma cambia Mataró por Zaragoza.

Otro negocio del sector confección anteriormente anclado en Mataró, Acordfil, también escoge Zaragoza como su nueva ciudad de acogida.

Compañía Mundial de Importaciones Textiles, una comercializadora de comercial de productos textiles alpor mayor fundada hace más de 30 años, que abandona Sant Adrià de Besòs para irse a Valencia.

A. Gratacós, histórica firma de comercio textil de Barcelona, con casi 80 años de existencia se escapa de Barcelona a Madrid.

Imagen: Punt Roma, Colección Invierno 2017