La industria y el comercio textil británico se están centrando en la creatividad y la buena calidad como forma de afrontar la actual crisis, según los resultados de una encuesta sobre Moda 2009, realizada por la consultora internacional WGSN. La investigación ha concluido quelos retailers británicos están enfocando su actividad en la construcción de su imagen de marca (17 por ciento) y en la oferta de sus mejores productos y los más exclusivos (13 por ciento). Además, los fabricantes ven la innovación y la creatividad como una oportunidad clave (15 por ciento).
En este sentido, Sandra Halliday, editora manager de la sección de Recursos de negocio y Análisis de WGSN dijo que: "en el contexto actual, WGSN ha visto que tanto los comercios como sus proveedores enfatizarán elementos de su oferta que hacen sentirse bien al consumidor como el comercio justo o la conciencia medioambiental. A su vez, buscarán la singularidad y la exclusividad recurriendo, incluso, al low cost, y combinarán lo clásico con la innovación".
La encuesta realizada por WGSN indica que la industria prevé que los consumidores se decidirán más por artículos duraderos y clásicos que por símbolos de estatus social. Los encuestados, a su vez, predicen el declive de las prendas fetiche de las "celebrities", como el "It-bag" (36 por ciento) y los vestidos "baby doll" (37 por ciento), mientras que las reminiscencias de los 80 suben imparablemente, lideradas por los jersey de vigore gris (91 por ciento), los contrastes en los estampados y los flecos (76 por ciento) y los monos (74 por ciento).
Según Amanda Carr, editora de contenidos de WGSN de diseño de tiendas y merchandising visual, cada grupo de edad reacciona de distinta manera ante la recesión. Así, los nacidos en el baby boom demandan la simplicidad. Por el contrario, los jóvenes situados entre los 16 y los 24 años por el momento consumen sin preocuparse por la crisis actual.
