Lo que Paris nos dejó

Desde las extravagancias medievales de John Galliano para Christian Dior, hasta el glamour recatado de Armani, la pasarela haute couture que acaba de finalizar en París confirma el triunfo de la silueta femenina para la temporada Otoño/Invierno 2006. Trajes sastre con falda tubo y chaquetas muy entalladas inspiradas en la década de los 40 y 50 marcaron la tónica en la colección de Valentino. En tanto que rasos, tules, brocados y pasamanería dominaron en la mayoría de las piezas de noche, donde el negro se presentó como protagonista indiscutible.

Armani por su parte se decantó por los colores neutros como gris, azul, negro y blanco. El diseñador italiano eligió las chaquetas ajustadas para combinar tanto con pantalones anchos, como con dos tipos de faldas: las plisadas con vuelo y las recogidas al frente con una generosa apertura que marca la silueta, al mejor estilo Hollywood. Las botas de pierna entera fueron el look preferido de Chanel, en una colección joven, de líneas rectas, faldas muy cortas y grandes botones. Cualquier coincidencia con los años 60 no es pura coincidencia.

Jean Paul Gaultier presentó una de sus mejores y más ponibles colecciones de alta costura de las últimas temporadas. Textiles exquisitos y contrastes de volúmenes a través de pantalones y faldas ajustados a la altura del tobillo se coronaron con unos originales peinados que simulaban sombreros. Los enormes cuellos de piel combinaron a la perfección tanto en abrigos XXL como en entalladas chaquetas con predominio de marrones, morados, grises y negro.

Givenchy por su parte reveló una original colección de formas ligeramente arquitectónicas y a las que se incorporan las chaquetas y faldas de flecos, y muchas pieles. Los colores preferidos por su diseñador Ricardo Tisci han sido blanco, el beige y el negro. Los drapeados, los volantes y fruncidos dominaron la propuesta de Christian Lacroix. Los contrastes de colores a través de vestidos en pleno gris o negro con medias opacas en morado o rojo le dieron un aire naif a sus conjuntos de chaquetas y faldas cortas y muy amplias.

Capítulo aparte merecen las creaciones de John Galliano para Dior. El característico derroche de creatividad teatral tuvo su inspiración principal en las armaduras de los caballeros de la Edad Media para la mujer extravagante por un lado y por otro, un glam rock barroco de panties negras combinadas con chaquetas de cuero y amplias mangas fruncidas. Como no podía ser de otra manera, el diseñador colmó todas las expectativas al aparecer al final del desfile vestido de astronauta.